REDACCIÓN/Guanajuato, Gto. 09 de noviembre de 2017.- El Mtro. Juan Carlos Romero Hicks, a la fecha Senador de la República y egresado de la Licenciatura en Relaciones Industriales por la Universidad de Guanajuato (UG) desde hace 40 años, habló en conferencia magistral de los orígenes de esta importante profesión, impulsada en su momento por el Rector, Lic. Euquerio Guerrero López.
El Mtro. Romero Hicks participó de los festejos del 50 aniversario de la Licenciatura en Relaciones Industriales y, a su vez, fue reconocido como un egresado que ha llevado en alto el prestigio y valores de la UG.
En su disertación, el Senador hizo un recuento histórico salpicado de anécdotas personales y conocidas por otros universitarios, y se dijo honrado y emocionado del encuentro con las primeras generaciones, con la suya propia (1972-77) y las nuevas generaciones de jóvenes licenciados y estudiantes.
De entrada, recordó que apenas en agosto del año 1955, Don José Aguilar y Maya y Don Antonio Torres Gómez, Gobernador de Guanajuato y Rector de la UG respectivamente, inauguraron el Auditorio General de la UG, lugar que muchos piensan que tiene más tiempo, el cual acerca a Guanajuato y México con el mundo.
“Fundar una obra es un acto de amor, de visión y de esperanza”, sostuvo el Mtro. Romero, “eso fue lo que hizo Don Euquerio Guerrero López”, quien creó al mes de asumir su Rectoría, en 1967, la carrera de Relaciones Industriales.
De Don Euquerio afirmó que “fue un hombre caballeroso, sabio, humilde, prudente y elocuente y gran visionario”, que llevó al proceso universitario esta propuesta y la cual fue aprobada en 1967.
En ese tenor, refirió las Relaciones Industriales en su momento actual.; dijo que este concepto proviene de la doctrina social, conjunto de principios, valores y técnicas que persiguen el desarrollo integral del hombre en el trabajo socialmente organizado. “Repasar el mundo de hoy con una mirada al pasado, revisar quién es el profesionista de Relaciones Industriales en diferentes acepciones: universitario, ciudadano, humanista, educador y preguntarnos en qué mundo vivimos, qué pasa con el entorno” en donde la demografía es diferente y el mundo del trabajo también.
“En una sociedad líquida en donde lo único claro es que todo está confuso y las certezas se vuelven dudas y la sociedad globalizada comparte buenas y malas prácticas”, hay una sociedad que no tiene centro, que ha perdido la esencia de la vida, el reconocimiento de qué principio y fin de la actividad, debe ser el ser humano, sostuvo, al tiempo de observar que mientras la sociedad actual vive interconectada, está también más lejos y con la inteligencia artificial, las máquinas desplazan a la persona humana.
En el año 1967 la gente buscaba estabilidad, trabajar en una sola empresa toda la vida, recordó, lo que hoy casi a ningún “millenial” se le ocurriría; la participación de la mujer en el trabajo formal era mínima y las condiciones laborales muy diferentes.
“¿Hoy el mundo es mejor, tenemos mejores personas, empresas, sindicatos, cooperativas, instituciones públicas o privadas, mejores trabajadores, más justicia en la relación laboral?” se preguntó el Senador, quien reconoció que la respuesta es difícil y es donde Relaciones Industriales “debe erigirse todos los días como un paladín”.
“No somos los únicos, los mejores o los más iluminados, pero heredamos una formación en valores, principios y técnicas que se van perfeccionando para hacer del ser humano alguien que pueda lograr su perfección. En el camino seguro se han dejado deudas, pero a quien más se le da, más se le exige”, concluyó.
