Carlos Olvera
Guanajuato, Gto. 20 de julio de 2011.- Los propietarios del Cerro del Hormiguero autorizaron por escrito que se celebre, como cada año, el tradicional Día de la Cueva en la capital del estado. La familia Marcoccio accedió a la petición del gobierno municipal, dejando a un lado el hecho de que el gobierno de Nicéforo Guerrero trae con ella un pleito legal por la factibilidad de cambio de uso de suelo en las inmediaciones del Cerro de la Bufa.
Entrevistado en un hotel de la capital, durante el festejo del Día de la Secretaria, el alcalde manifestó que ya se hizo el trámite correspondiente para que la celebración en honor de San Ignacio de Loyola, Patrono de la Ciudad, que tiene lugar en el cerro del Hormiguero desde 1624, según el cronista de la ciudad, se realice sin ningún problema.
Al respecto refirió el presidente municipal “nosotros les pedimos los terrenos donde se celebra la Fiesta de la Cueva y ya lo autorizó la familia (Marcoccio) para que se haga como siempre se hace; incluso lo pedimos por escrito y nos lo dieron por escrito, para tener evidencia de que ahí será la Fiesta de la Cueva”.
A la vez informó que 2 mil árboles de pirul serán donados por los Marcoccio al gobierno municipal para ser plantados en la comunidad de la Yerbabuena y el Parque Ecológico el Orito, y señaló que los árboles en donación no sólo se han pedido a los particulares sino también a la Secretaría de la Defensa Nacional para poder mantener la reforestación constante en el municipio de Guanajuato.
El presidente puntualizó que las donaciones que se están solicitando son de árboles de más de metro y medio de alto, para que no corran el riesgo de ser devorados por los animales.
Nicéforo Guerrero Reynoso señaló que con la autorización para realizar la fiesta, el Ayuntamiento municipal administrará la zona y prácticamente ya está todo listo para que el próximo 31 de julio se celebre la Fiesta en la Cueva, fecha en que, incluso, se estrenará una estatuilla de San Ignacio de Loyola en la Cueva principal.
