Guanajuato, Gto. 30 de septiembre de 2013.- Al considerar que los delitos que se le imputan: lesiones y abuso erótico sexual, no son considerados graves, la juez Paulina Medina Manzano determinó que el agresor de Lucero Salcedo Palacios continúe su proceso el libertad, al que además se le impuso cubrir la cantidad de 15 mil 630 pesos, como reparación del daño.
La juez desechó la petición de la fiscal, quien solicitó que Miguel Ángel Jasso Manríquez enfrentara el proceso penal en prisión preventiva, al concluir la audiencia en una de las salas de oralidad del Poder Judicial, a un lado del Cereso de Puentecillas en la capital.
La sesión empezó a las 9:30 horas en la mañana, y en su transcurso se dio lectura a las declaraciones de la víctima y del agresor, así como se dieron a conocer los resultados de los peritajes de campo, psicológicos y médicos. En este último aspecto, Lucero presentó 19 lesiones en diversas partes del cuerpo y estrés postraumático.
Luego de ser suspendida a las 12:00 horas, la audiencia fue retomada a las 14:49 horas. En esta segunda parte, tuvo lugar el debate más intenso entre la defensa y la fiscalía. El inculpado se dijo arrepentido y avergonzado e “independientemente del resultado de la audiencia” ofreció disculpas.
En lugar de la prisión preventiva, la juez determinó que el agresor pase a firmar semanalmente a la Dirección de Seguridad Pública del municipio, y que no podrá salir del territorio municipal o estatal, sin autorización.
De igual manera impuso a Jasso Manríquez que en ningún momento, durante tres meses, podrá acercarse a una distancia menor de 20 metros en torno de Lucero o su familia, ni podrá asistir a lugares donde se expendan bebidas embriagantes, y deberá asistir al Centro Multidisciplinario de Atención Integral a la Violencia, para recibir terapia. También tendrá que pagar 15 mil 630 pesos como reparación del daño en un mes y en dos meses entregar un perfil criminológico.
Al término de la audiencia, los reproches por parte de quienes acompañaron a la joven se dirigieron a señalar que la fiscal debió de sustentar los delitos intento de violación y tentativa de homicidio, y no lesiones y abusos erótico-sexuales.
