Detienen a policías de Moroleón y Uriangato por complicidad con narcotraficantes

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Redacción

Guanajuato, Gto. 18 de mayo de 2011.- El procurador de Justicia de Guanajuato, Carlos Zamarripa Aguirre, informó que tras la detención de los integrantes de la Familia Michoacana, quienes según sus declaraciones cobraban hasta 15 millones de pesos por rescate, trabajaban desde hace 6 meses en contubernio con elementos policiacos de los municipios mencionados.

Carlos Zamarripa Aguirre, procurador de Justicia del estado (Foto: Archivo)

Señaló lo anterior luego de que elementos de la policía ministerial detuvieron a los directores de policía de los municipios de Uriangato y Moroleón, en el mismo operativo en el que aprehendieron a 3 peligrosos integrantes del grupo delictivo la Familia Michoacana, a quienes se les acreditan al menos 23 secuestros y 12 homicidios en la región.

Entre los 7 elementos policiacos detenidos están: Luis Alberto Espinoza y Marcelino López Domínguez, director y subdirector de policía en Moroleón, así como Ponciano Moreno Báez, director de policía en Uriangato, además de otros mandos, incluido el primer oficial de la policía de Uriangato, José Manuel Pérez García, quien es hermano del alcalde Ramón Pérez García.

En respuesta a pregunta expresa sobre si se está investigando al presidente municipal del municipio de Uriangato, el funcionario estatal manifestó que en las investigaciones no hay excepciones, “la información arrojó los datos suficientes, para que se presente en esta calidad en la que ahora lo hemos presentado y está soportada en las pruebas acopiadas en las averiguaciones previas respectivas”, subrayó.

Con relación al operativo de intervención en las direcciones de policía de los municipios de Moroleón y Uriangato (a la fecha 6 en total en igual número de municipios) para buscar narcopolicías, dijo que éstas se dieron tras la detención y declaraciones de Rigoberto Soto Brito, alias “el Gordo”; Eduardo Santa María Alvarado, alias “la Chucudilla” (ambos originarios de Michoacán) y Pedro Hernández Baeza, alias “El Chaparro”, procedente de Uriangato, los tres integrantes del Grupo delictivo la Familia Michoacana.

Carlos Zamarripa Aguirre informó que confiscaron dos armas 9 milímetros y un vehículo, y se logró asegurar un predio donde encontraron, en una fosa clandestina, el cadáver de Alicia Guzmán García, “alias la Comadre”, quien primero fue secuestrada.

Al ser aprehendidos, los integrantes de la Familia Michoacana declararon toda la actividad ilícita que realizaban en la zona, entre la que destacaron que contaban con la protección de los cuerpos policiacos de ambos municipios a cambio se sueldos mensuales que iban desde los mil hasta los 15 mil pesos dependiendo del rango en la corporación y a la colaboración que prestaban.

El Procurador de Justicia del estado manifestó que a raíz de los otros operativos que se están realizando en la entidad, los elementos “ya se habían puesto de acuerdo en cuanto a las respuestas que deberían responder a los cuestionamientos de la autoridad, en relación con sus vínculos con la delincuencia organizada”.

Por ese motivo, añadió el procurador, trataron de desaparecer información incriminatoria de aparatos de radio comunicación y celulares, pero aún así se pudo establecer la certeza de que el director y subdirector de policía en Moroleón, así como el director de policía en Uriangato, entre otros mandos y elementos que estarían por detenerse, estaban vinculados con el grupo delictivo.