Guanajuato, Gto. 19 de septiembre de 2013.- Un forma común de denuncia de violencia contra las mujeres a últimas fechas es a través de las redes sociales, según la ex encargada de la Dirección de Atención a la Mujer, Iovanna Rocha Cano.
Al menos 20 casos en la capital, le fueron remitidos por estos medios hasta finales del mes pasado, cuando dejó la Dirección de Atención a la Mujer.
Rocha Cano cuestionó la efectividad de los resultados institucionales para darles seguridad a las víctimas de este tipo de agresiones que han recurrido a estos mecanismos en su necesidad urgente por proteger su vida y las de sus familias.
“Las mujeres están utilizando esos medios en un llamado de desesperación, porque no se están dando las circunstancias para garantizar su seguridad y en estos casos las autoridades tendrán que poner los focos en rojo, porque ya no hay credibilidad en las instituciones”, señaló.
Rocha Cano señaló que en los últimos meses al frente de la dirección de Atención a la Mujer Guanajuatense se incrementó considerablemente, el número de casos denunciados por estas vías porque cuando van a las instancias correspondientes no les hacen caso o desconocen los protocolos de seguridad para el resguardo de las víctimas.
“La denuncia a través de medios en un primer momento las protege porque las pone en la mira pública, pero esto tiene una vigencia limitada, sobre todo porque hay autoridades que no terminan de entender la violencia de género y así como hay actos de solidaridad, también hay acciones de señalamiento que podrían victimizar aún más a la víctima”, consideró.
En el último caso que se ventila tiene que ver con una joven de 18 años, Lucero, que hace público que hace una semana que presentó la denuncia ante el Ministerio Público y no han hecho los peritajes correspondientes ni hay una orden de restricción en contra de su agresor, otro joven de 18 años, cuya foto luce al lado de la evidencia de los golpes en los sitios de familiares y amigos.
La joven afirma que la intención de Miguel Ángel Jasso, el presunto agresor, no fue de violarla, porque no trató de tocarla ni de quitarle la ropa, sino que su intención era privarla de la vida.
Ahora familiares y amigos suben a sus muros en sus páginas de Facebook la siguiente advertencia, para presionar a las autoridades a que hagan su trabajo.
