De gira con José Alfredo

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Guanajuato, Gto. 15 de octubre de 2013.- La obra que retrata parte de  la vida del compositor guanajuatense José Alfredo Jiménez, La Vida no Vale Nada podría irse de gira en breve, además de montarse en alguno de los teatros de la capital, informó el director de la puesta en escena, Luis Martín Solís.

La puesta en escena podría presentarse en Colombia o Estados Unidos (Foto: Especial)

El director manifestó que están teniendo invitaciones de Colombia y de algunas partes de Estados Unidos, pero además ya están integrando las carpetas con videos para empezarla a promocionar.

“Esto es super popular, a lo mejor hay que hacer una versión reducida, porque es mucha gente para mover; ya viendo números podríamos reducir el elenco sin que pierda historia y se puede mover, porque no hay un estado del país que no quiera a José Alfredo”, apuntó el director.

“Es una ficción deliciosa,  entre esas ficciones habrá unas cosillas verdaderas otras no, pero finalmente lo que un artista detona es un imaginario enorme;  como decía Monsiváis: José Alfredo forma parte de una memoria emocional sin fronteras”, dijo.

De hecho, consideró que hay pocas cosas que sean tan nacionales como José Alfredo, como reconoce  el propio hijo del compositor del mismo nombre, José Alfredo (Junior) quién estuvo presente, durante la exhibición de la obra.

“Cada vez que hay un homenaje, o cada vez que él sale a relucir  es porque los grandes artistas están abiertos siempre, a las nuevas visiones… y se pueden representar como sea, pueden estar abiertos a múltiples narrativas y con una música basta”,  señaló.

“José Alfredo soporta cualquier cosa, a pesar de que no supiera música desborda en mucho la comunicación con el público y eso es lo que vale la pena”, añadió.

Por su parte, el director del Instituto de Cultura del estado, Juan Alcocer Flores reveló que hay solicitudes de otras plazas  que están pidiendo la puesta en escena.

“Entonces es cuestión de ver los lugares que desean llevarse de gira, porque también hay que considerar el costo económico”, resaltó.

Cantan en voz baja con “El hijo del pueblo”

El talento de José Alfredo Jiménez fue tan grande que hasta la muerte convenció para que lo dejara regresar a terminar una canción.

Este es el argumento de La vida no vale nada, obra que realizaron Alejandro Román y  Luis Martín Solís sobre la vida del cantante que está considerado uno de los grandes de la composición en México.

Al evento acudió nada menos que José Alfredo Jiménez (hijo) a recibir el homenaje teatral a su padre;  el director del FIC, Jorge Volpi Escalante y el director del Instituto de Cultura, Juan Alcocer.

A lo largo de la obra, estrenada ante el público Cervantino en el Teatro Principal, el hijo predilecto de Dolores Hidalgo se va encontrando con cada uno de sus célebres amantes y amigos entre los que se cuentan La Tigresa, Columba Domínguez, Lucha Villa y Chavela Vargas y  el Cinco  copas,  La Tota Carbajal.

Por extraño que parezca, también salen representados Octavio Paz y el mismísimo Jean Paul Sartre, lo que le aporta una ficción lúdica de las anécdotas que se contaban acerca del creador de piezas épicas  como El Rey y Ella.

Sin embargo, la producción Instituto Estatal de Cultura no dejó a todos contentos, porque esperaban un resultado mayor, es decir, la obra se quedó corta para el tamaño del propio compositor.

Saliendo del teatro a pesar del aplauso que se ganó el intérprete de José Alfredo, el actor leonés  Francisco Márquez  Asencio y la actriz  guanajuatense Dulce Medina Navarro que la hizo de la muerte,  no acabó en ovación de pie, a pesar de los gritos de algunos fanáticos  que se desgañitaban con los: ¡¡Bravo!!, ¡¡Bravo!!.

Lo que quedó de manifiesto es la versatilidad musical en cuyas entonaciones las letras de José Alfredo Jiménez,  quedan como anillo al dedo. Así  el Mariachi Conquistadores de América, bajo la dirección de los hermanos Padilla, que acompañaron a la  cantante de Irapuato, Alejandra Sandoval,  Mario Guiot  y Jorge Jiménez Rubio,  interpretando  piezas clásicas,  como en la música jarocha con  Son del Montón y Salomón Maawad Jazz Quartet, fue cantado por varios de los asistentes, en voz baja.

Además de los músicos y actores participan un equipo de cinco bailarines en esta producción que en números redondos tuvo un costo de producción, de principio a fin,  de unos 600 mil pesos y esperan que pronto se monte en una versión más breve en la ciudad o en el estado.