LAS HIJAS DE YAPPAN Y TLAHUITZIN

Compartir

(Una breve introducción a los escorpiones de Guanajuato)

La forma del escorpión ha sido reconocida por antiguas civilizaciones, y tanto así, que llegaron a reconocer su forma entre las estrellas, en el mapa celestial. Así encontramos la Constelación Scorpio, cuya estrella principal es conocida coloquialmente con el nombre de Antares, que se considera, observando el cielo nocturno, la decimosexta más brillante. El escorpión se le identifica en todas partes, especialmente en donde habita esta fascinante criatura.

Los escorpiones, Clase Arachnida, orden Scorpiones, son un grupo muy fácil de reconocer visualmente y esto les ha convertido en una de las criaturas más icónicas y simbólicas del Reino Animal, siendo su aguijón su elemento más distintivo.

Así como ocurre en estos tiempos, en la antigüedad se le distinguió integrándoles mapa celestial.

Antes de continuar, me gustaría mencionar que lo que me insipiró el título para este artículo fue el mito/leyenda náhuatl: el mito de Yappan, quien junto con su esposa Tlahuitzin fueron convertidos en escorpiones, y según reza la leyenda, fue de esa pareja de donde surgieron todos los tipos de escorpiones que conocemos.

Los escorpiones son los más ancestrales arácnidos. Aparecieron por primera vez durante el Período Silúrico. El fósil más antiguo que se ha encontrado es  el Paraioscorpio venator , del Silúrico, como mencionaba, localizado en Winscosin, Estados Unidos. Estamos hablando de   aproximadamente 437 millones de años. Todavía es tema de debate entre académicos, el definir si esos primitivos escorpiones fueron acuáticos, terrestres o anfibios.

Los escorpiones están por todas partes del planeta, excepción de la Antártica, las zonas boreales y las islas del Pacífico. En partes del mundo de donde no son nativos, como Gran Bretaña, Nueva Zelanda y otras islas de Oceanía, los escorpiones han sido introducidos por la actividad humana.

En varias partes del mundo, México incluído, es un peligro el envenenamiento por picadura de escorpión. Desafortunadamente, la sistemática es un tanto problemática y cambia continuamente. Estos fascinantes animales son tan complejos que hasta hoy se discute en círculos académicos detalles sobre familia, género y especie. Quizá con el tiempo pueda resolverse ese dilema.

Hasta este recién finalizado 2021 de las especies extantes de escorpiones, se reconocen aproximadamente 2641, más 145 especies fósiles. Hasta el 2015, se sabía de la existencia de 281 especies en México, muchas endémicas ( Santibáñez, C.E. et al, 2016). Desde entonces han continuado los descubrimientos de nuevas especies en México, continuando en revisión los temas de familia, género y especie.

La fauna de escorpiones en México es diversa y es una de las más numerosas en el mundo, sobre todo en zonas como Baja California y la parte central del país. (Lourenco,W. & W.D. Sissom, 2000, & Santibáñez-López, C.E., et al 2016). Los escorpiones en México viven en dunas, desiertos, zonas semiáridas, en selvas tropicales secas, selvas en donde hay lluvia, montañas y en las cuevas más profundas. Un ejemplo es el escorpión que habita en cuevas (Alacran tartarus), Familia Typlochactidae , y vive aproximadamente 900 metros bajo el nivel del suelo.

Los escorpiones en México también varían mucho en tamaño, así encontramos los diminutos Typhlochactas mitchelli y T. sylvestris, Familia Typhlochactidae, ambos de menos de 10 milímetros de longitud, mientras que en contraste, tenemos las especies grandes del género Hadrurus y Hoffmanihadrurus, Familia Hadruridae, que miden 15 centímetros o más, siendo los más grandes escorpiones en Norteamérica. En cuanto a las picaduras, e los casos de Hadrurus y Hoffmanihadrurus   pueden ser dolorosas, pero sin ser letales.

En realidad, en la mayoría de escorpiones en el mundo, incluyendo México, la picadura de escorpión no es letal, aunque puede ser dolorosa y tener algunas reacciones. Todos los escorpiones portan veneno, inoculado a través del aguijón, que utilizan para someter a la presa y para defenderse y protegerse.

Los escorpiones venenosos en México pertenecen al genus Centruriodes, Familia Buthidae, tales como  Centruriodes elegans, C. exilicauda, C. infammatus,C. limpidusC. noxius  junto con algunas otras especies del mismo genus.

Hembra adulta Centruriodes gracilis, Familia Buthidae. A pesar de que esta especie habita en México, esta fotografía la tomé en el Distrito Miramar de La Habana, Cuba. Diciembre 13, 2013. ©Mark Pointer.

El mejor consejo que puedo ofrecer, es tratar una picadura con cuidado y respeto y si alguien es picado por escorpión, de inmediato ir al médico y de ser posible llevar consigo el espécimen, vivo o muerto para que pueda ser identificado y ver la gravedad o no de la picadura.

Centrándonos en Guanajuato, hay cuatro familias. La lista se basa en los estudios descritos por Santibáñez-López, CE, et al, 2016 como sigue:

La familia Buthidae, la mayor familia de escorpiones comprende aproximadamente 96 genera y más de 1230 especies en todo el mundo, de las cuales 40 viven en México. Una característica de esta familia es la angostura de sus pinzas y una cola de delgada a gruesa, dependiendo de las especies. La mayor parte de estudios de las especies mexicanas conciernen a Centruriodes y su veneno, a pesar de que solamente menos de una docena de especies tienen veneno altamente tóxico para humanos.

Lasa especies del genus Centruriodes en el Estado de Guanajuato incluye Centruriodes infamatus, C. ornatus and C. suffusus .  

La familia Diiplocentridae se reconoce fácilmente por la presencia de un tubérculo sub-aculear, (una característica encontrada en algunos genera y especies de escorpiones buthid) y sus tenazas redondeadas y robustas (pedipalpo chelae). Esta familia de escorpiones se representa por tres genera en México,  Bioculus, Diplocentrus and Kolotl. . Representantes de esta familia son los escorpiones fosoriales que viven en guaridas bajo tierra.

Esta familia está representada en el Estado de Guanajuato por Diplocentrus zacatecanus (Santibanez-Lopez, C.E. et al 2016).

La Familia Euscorpiidae, que comprende tres genera Mexicanos, Megacormus (seis especies en México), Plesiochactas and Troglocormus. Los especímenes en México, van de pequeños a medianos, de 35 a 65 milímetros de longitud. La familia está representada en Guanajuato por la especie Megacormus xichui, un pequeño escorpión café que vive en las selvas de roble de Xichu y Charco Azul (Gonzalez-Santillan,E. et al, 2017, & Kovarik F. 2019).

Vaejovis sp. Familia Vaejovidae no identificado en pose clásica. Tajo de Adjuntas, Guanajuato. Julio 15, 2015. ©Mark Pointer.

La Familia Vaejovidae, la más diversa en norteamérica es la más ampliamente distribuída en Guanajuato. Miembros de esta familia, siguiendo mis observaciones y estudios, son los más cumunes en Guanajuato capital, en zonas como Noria Alta, Marfil, ExHacienda Santa Teresa, Tajo de Adjuntas y Valenciana. En el estado habitan especímenes de Chihuahuanus bilineatus, C. glabrimanus, Mesomexovis punctatus, Thorellius cristimanus, Vaejovis dugesi, V. nigrescens and V. pococki.

Miembros de esta famiia son altamente especializados y viven en los hábitats más diversos, desde dunas y desiertos hasta ecosistemas montañosos, y algunos viven en cuevas. La picadura de muchas especies de esta familia en especial, como puedo constatar por experiencia, es dolorosa, pero inofensiva. Su veneno no es dañino para los humanos.

Muchas especies de escorpiones tienen hábitos solitarios, y casi todas las especies son nocturnas o crepusculares, quiere decir, están activos en el atardecer. La actividad nocturna está comprobada, ya que gracias a la fluorescencia que tienen bajo luz ultravioleta, podemos verlos con un brillo azul verdoso, así que para estudiarlos es muy útil cargar siempre una linterna con luz ultravioleta.

Hembra no identificada de escorpión Vaejovid con cría mostrando fluorescencia bajo luz ultravioleta. Tajo de Adjuntas, Guanajuato. Mayo 3, 2010. ©Mark Pointer.

Los escorpiones se alimentan de insectos, arañas y otros artópodos, también de otros escorpiones, aunque especímenes grands, como los escorpiones peludos del genus Hadrurus, Familia Hadruridae, el escorpión emperador (Pandinus imperator)  y los escorpiones de los bosques asiáticos Heterometrus Sp.), Famila Scorpionidae, también incluyen lagartijas y pequeños roedores en su dieta.

Sin embargo, a pesar de ser formidables predadores bien equipados, los escorpiones también son presa de otros animales como ranas, sapos, lagartijas, algunas especies de serpientes, pájaros, algunos mamíferos, escolopendras, genísaros y algunas especies de arañas, como la Viuda Negra (Latrodectus mactans y L. hesperus), Familia Theridiidae. En Guanajuato capital y los alrededores, yo mismo pude observar que es común encontrar especímenes secos de escorpiones Vaejovid en las telarañas de las viudas negras.

El cortejo para aparearse es complejo, un ritual que requiere que el macho tome las tenazas de la hembra, pedipalpos, chelae, y realizan una especie de danza ritual, algunos le llaman en Francés paseo de dos, promenade a deux , que puede durar  minutos o hasta horas, culminando en la colocación del espermatóforo, transferencia y fertilización de la hembra. Este ritual también incluye una especie de masaje de las tenazas (algunos lo llaman “beso del escorpión”) y picaduras que en su mundo tendrían connotación sexual. El acto no es del todo inofensivo a que a veces puede resultar en canibalismo.

Una vez que ocurre la fertilización, los descendientes se desarrollan dentro de la madre. La gestación de los escorpiones puede ser de meses hasta un año, dependiendo de la especie. Valga aquí mencionar que se ha registrado en algunas especies el fenómeno de partenogénesis. Con el tiempo la madre da a luz a los pequeños que suben al lomo de la madre y ahí continúan desarrollándose y mudando de piel, hasta que llega el momento en que la dejan y comienzan su vida independiente.

Vaejovis sp. No identificado. Hembra adulta con cría. Ex Hacienda Santa Teresa, Guanajuato. Agosto 13, 2015. ©Mark Pointer.

Además de los aspectos biológicos de su estudio, los escorpiones son una riquísima fuente de folklor, leyendas, mitos y supersticiones, un tema fascinante que será tema de algunos artículos en el futuro.

Un año nuevo ya ha comenzado, así que  aprovecho la oportunidad para desearles de todo corazón, mis estimados lectores, nuevo año 2022, lleno de salud, parabienes y prosperidad.

REFERENCIAS 

Carlos E. Santibáñez-López, Oscar, F. Francke, Carolina Ureta & Lourival D. Possani. 2016. Scorpions of Mexico: From species diversity to venom complexity. Toxins (Basel). 8 (1):2.

Edmundo González-Santillan, Juan Manuel González Ruiz & Luis, A. Escobedo Morales. 2017. A new species of Megacormus (Scorpiones;Euscorpiidae) from an oak pine forest in Guanajuato, Mexico, with an identification key to those species in the genus. Zootaxa 4299 (2):221-237.

Kovarik, F. 2019. Review of Megacormus,Karsch,1881, with a description of a new species (Scorpiones:Euscorpiidae). Euscorpius occaisional publications in scorpiology. No296.

Lourenco, W. & Sissom, W.D. 2000. Scorpiones in Llorente-Bousquetes J.E., Soriano E.G., Papavero N.,editors. Biodiversidad, Taxonomia y Biogeografia de Artropodos de Mexico: Hacia una síntesis de su conocimiento. Vol 2. UNAM/Conabio/Bayer; Mexico City. PP 115-135.